CONSEJOS PARA AHORRAR AL REFORMAR TU BAÑO

El baño y la cocina son probablemente los dos espacios de la casa que más usamos y que más se desgastan a consecuencia de la humedad.

La instalación de fontanería tiene una duración de unos 15 años y pasados estos, conviene cambiarla, por lo tanto, cocinas y baños son los dos espacios que requieren mayor mantenimiento y que más se reforman. 

A veces no sólo para conseguir un espacio renovado, sino también para adaptarlo a nuestras nuevas necesidades y hacerlo más funcional.

Las reformas nos suelen dar muchísimo miedo y pereza, pero son necesarias… nunca sabemos por dónde empezar, nos saturamos de información y tememos acabar gastando mucho más de lo que pensamos ante posibles imprevistos.

Vamos a analizar en esta ocasión, lo que supone la reforma de un baño y a analizar la inversión que requiere. Cada reforma es diferente y son muchos factores los que pueden influir en el precio (calidad materiales, tipo de reforma, metros cuadrados…) por eso es realmente importante pedir presupuestos a un buen profesional.

Para empezar conviene aclarar que podemos hacer dos tipos de reformas:

1) Reforma parcial: Nuestro cuarto de baño es relativamente nuevo y simplemente lo queremos adaptar a nuestras necesidades y gustos estéticos cambiando algunos elementos. Con una mínima inversión, podemos conseguir grandes resultados.

2) Reforma integral: Nuestro cuarto de baño tiene más de 10 años y necesita una renovación total: suelos y paredes, tuberías nuevas, sanitario…etc. Si no cambiamos tuberías e instalación eléctrica y nos dan problemas después de haber reformado el baño, el arreglo será mucho más caro.

Es conveniente que los materiales “durables” sean de una calidad mayor que aquellos que son más fáciles de sustituir, es decir, gástate el dinero en revestimientos de calidad que te van a durar 15 años, y no en elementos que puedes cambiar cuando quieras.

El orden de los trabajos a realizar en la reforma de un baño es el siguiente:

     1.     Cambios en las estructuras: mover la puerta de entradas de sitio para aprovechar mejor el espacio, desplazar tabiques, bajar o subir techo…
2.     Instalación del cableado eléctrico y tuberías.
3.     Revestir paredes y suelo.
4.     Instalación de sanitarios, grifos y radiador.
5.     Puntos de luz.
6.     Armarios.
7.     Complementos y adornos.
 

Cinco consejos importantes a tener en cuenta antes de realizar una reforma:

1.     Reflexiona sobre cuáles son las necesidades reales. No pierdas de vista el objetivo de la reforma y explora las diferentes posibilidades y soluciones para que se adapten a la perfección al espacio que tienes. Recuerda que lo práctico no está reñido con lo estético.

2.     Pide diferentes presupuestos, no sólo es algo aconsejable, es algo fundamental. No tengas miedo de preguntar y valorar diferentes opciones. Los presupuestos deben ser detallados y a ser posible desglosados. Compáralos, y una vez que te decidas por uno, reserva una cantidad de dinero extra para posibles imprevistos. En la web www.3Presupuestos.com puedes pedir diferentes presupuestos y compararlos para ahorrar y elegir el que mejor se adapte a nuestras necesidades.

3.     Trabaja siempre con profesionales y déjate asesorar por ellos, parece lógico pero es la parte más importante para el éxito de la reforma. Recuerda que lo barato siempre sale caro y confía sólo en profesionales de confianza. Marca unos plazos para que la reforma finalice dentro del tiempo que te has marcado. Déjate asesorar pero es mejor que busques y elijas personalmente los productos y materiales que vas a usar en la reforma. Inodoros, platos de ducha, lavabos, muebles… etc. los puedes comprar en “materialesdefabrica.com”.

4.     Valora la posibilidad de modificar la distribución de los elementos de tu cuarto de baño para dar mayor amplitud y aprovechar al máximo la superficie de que dispones. Existen un montón de opciones diferentes de almacenaje que casi ni se notan. Algunos elementos no serán fáciles de modificar, como el sanitario porque necesita estar ubicado en la bajante, pero siempre hay opciones. Pon tu toque personal en complementos y detalles y reserva los tonos neutros para las grandes áreas.

5.     No te olvides de la ventilación, calefacción y de la iluminación. La mejor opción de iluminación es una luz global de ambiente combinada con otra focalizada y más fuerte. Una buena ventilación es imprescindible si no queremos tener condensaciones o humedades. Si no tienes ventana, empotra en la pared opuesta a la puerta un ventilador extractor para que circule el aire.

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