Planifica tus gastos por encima de antemano. Todas las épocas del año no gastamos lo mismo, hay épocas más propicias a gastar y esto a veces no se puede evitar. Tenlo en cuenta a la hora de planificar tus gastos.
Construye un colchón con el dinero que ahorres. Nunca sabes qué
puede pasar en el futuro y tener una cantidad de dinero disponible para cubrir
imprevistos te dará seguridad. No es fácil, pero se consigue poco y desde luego
merece la pena. En la vida existen muchos ciclos y nunca se sabes cuando lo
puedes necesitar.
Calcula cuánto te cuestan al año esos
pequeños caprichos que te das, y verás como al final suman dinero.
Ejemplo:
§ Pedir comida a domicilio una vez a la semana= 700 €
§ Luces encendidas cunado no las necesitas= 450 €
§ Comprar dulces los fines de semana= 630€
§ Un café diario= 560 €
§ Salir a cenar una vez por semana=490 €