Algunos tipos de alimentos no requieren de indicaciones de
fecha de caducidad, como frutas y verduras frescas, vino, pan (porque es de
consumo inmediato), sal, vinagre y azucar. Pero otros, los que están envasados
o en conserva, si.
La fecha de caducidad nos indica una fecha límite tras la
cual el producto adquirido deja de ser seguro para la salud y por tanto no se
debe consumir.
Y la fecha de “consumir preferentemente antes de...” se refiere más bien a un tema relacionado con la calidad. A partir de esta fecha la calidad del producto baja, pero es perfectamente apto para su consumo por que está en buenas condiciones. Por lo tanto, estos son dos conceptos importante que no deberían confundirse.
Y la fecha de “consumir preferentemente antes de...” se refiere más bien a un tema relacionado con la calidad. A partir de esta fecha la calidad del producto baja, pero es perfectamente apto para su consumo por que está en buenas condiciones. Por lo tanto, estos son dos conceptos importante que no deberían confundirse.
Aunque la diferencia entre una y otra es evidente, los
consumidores suelen darle el mismo tratamiento a la una y a la otra y desechan
los alimentos una vez pasada la fecha.
Esto se traduce en un desperdicio de aproximadamente 8,3 toneladas de alimentos anuales.
Esto se traduce en un desperdicio de aproximadamente 8,3 toneladas de alimentos anuales.
Al consumidor le conviene saber que si adquiere un producto
caducado, tiene derecho a que el vendedor se lo restituya.